viernes, 3 de octubre de 2008

LOS PLANETAS








LOS PLANETAS













Aproximación a la obra de Los Planetas.





1. Los discos de Los Planetas.

1.1. Super 8 (1994).
1.2. Pop (1996).
1.3. Una semana en el motor de un autobús (1998).
1.4. Unidad de desplazamiento (2000).
1.5. Encuentro con entidades (2002).
1.6. Contra la ley de la gravedad (2004).
1.7. La leyenda del espacio (2007).




2. Aparición, repercusión y originalidad.

2.1. ¿Los Planetas, un grupo “indie”?
2.2. Letras en castellano.
2.3. La relación con las drogas.
2.4. Influencias.
2.5. Actitud rebelde y relación con los medios.
2.6. Los Planetas en concierto.










APROXIMACIÓN A LA OBRA DE LOS PLANETAS.


Los Planetas es un grupo de música pop de Granada, que desarrolla su actividad a partir de la segunda mitad de la década de los 90 hasta nuestros días. Recogen la influencia de grupos anglosajones caracterizados por sus densas guitarras, como los Mercury Rev, Spacemen 3 o Joy Division. La banda está formada por Juan Rodríguez, conocido como J (voz y guitarra), Florent Muñoz (guitarra), Erik Jiménez (batería), Banin Fraile (teclados y guitarras) y Miguel López (bajo). A lo largo de su trayectoria han ido cambiando algunos miembros del grupo. Jota y Florent, núcleo fundador, permanecen desde el principio. Otros, como May Oliver, Paco Rodríguez, Raúl Santos y Kieran Stephen han ido pasando a lo largo de los años.
A comienzos de los años 90, tras un breve período llamándose Los Subterráneos, ganan el concurso de maquetas de Radio 3 de 1992, con “Mi hermana pequeña”, que se editará dentro del EP Medusa, producido por la pequeña discográfica Elefant Records, en 1993. En esos primeros años, formados por Jota, Florent, May y Paco Rodríguez, Los Planetas dejan claro pronto que la etiqueta de “noise pop” se les queda pequeña y que su sonido hipnótico y reverberado, que bebe de fuentes tan dispares como la Velvet Underground, Television y Sonic Youth, esconden una capacidad creativa poco habitual.
Después de editar sus dos primeros LPs, Super 8 (1994) y Pop (1996), ya bajo el sello de la multinacional RCA, Los Planetas sufren una especie de crisis de crecimiento: todavía no poseen un directo a la altura de sus composiciones, y las trayectorias personales de los miembros comienzan a separarse. 1996 y 1997 son dos años difíciles para Jota y Florent, que pierden a May y a Raúl, sustituidos por Kieran Stephen al bajo y el potente Erik Jiménez en la batería.
En 1998 graban y editan su tercer disco, Una semana en el motor de un autobús, en el cual continúan reivindicando el espíritu guitarrero que les caracteriza aunque esta vez presentado a través de temas largos y complejos, que les encumbra directamente a la cima del rock independiente nacional.
En el 2000 Kieran Stephan se marcha y es sustituído por Miguel López. Ese año publican Unidad de desplazamiento, en el cual buscan sonidos nuevos, menos noise y más lisérgicos. Es el primero editado y grabado en El Refugio Antiaéreo, un estudio de grabación que Los Planetas abren en su Granada natal y que les da la posibilidad de grabar ellos mismos sus discos. A partir de aquí la formación de la banda se estabiliza y graban sucesivamente Encuentros con entidades (2002), Contra la ley de la gravedad (2004) y La leyenda del espacio (2007), reinventándose continuamente, buscando no repetir fórmulas.
La importancia de su obra hace necesario un análisis crítico profundo de cada uno de sus discos, analizándolos por separado. También es obligado reflexionar acerca de la repercusión que tuvo su aparición y como se han convertido en el grupo referente de la escena independiente en España desde su aparición mitad de los años 90.








1. LOS DISCOS DE LOS PLANETAS.


1.1. SUPER 8 (1994).


En 1994 se grabó el disco más importante de la escena indie española bajo el sello de la multinacional RCA. El álbum de debut de Los Planetas es casi un cóctel de existencialismo adolescente. El tedio, las ganas de salir corriendo, las preguntas que no tienen respuesta, los celos , las drogas, aparecen de forma cíclica en sus canciones. “Si está bien”, “Desorden”, “10.000” o “Rey Sombra” y “De viaje” conforman el hilo argumental más oscuro y brillante, mientas que “La Caja del diablo”, “Jesús” o “Estos últimos días” es el lado más intenso, noise y nervioso.
Como álbum de debut es rompedor, con letras sencillas pero intensas. “Podemos irnos juntos lejos de este mundo tú y yo” es la primera frase de este disco, pertenece a la canción “De viaje”. Luego Jota cantará cosas como “a veces sólo quiero huir” o “ahora tengo una misión, ven y camina de mi mano”, y con esos dos o tres ejemplos podemos sentar las bases líricas de Super 8: el escapismo, una constante invitación a abandonarlo todo, las emociones legales o ilegales, el trauma post-ruptura (“¿Qué puedo hacer?”), la nostalgia (“Estos últimos días”), el sexo adolescente (“10.000”), las drogas (“Rey Sombra”), las peores pesadillas (“La caja del diablo”) o la impotencia emocional (“Si está bien”).
Musicalmente se trata de un disco arriesgado para ser una primera obra, con dos vertientes diferentes. Por una lado, el pop descarado y transparente de “¿Qué puedo hacer?” y la rotundidad de “De viaje”, “Jesús” y “Brigitte”. Y por otro, las melodías de doble y hasta triple filo, el noise-pop, entre la excitación y la aflicción más torturada del resto del disco: sea en forma de homenaje a Ian Curtis (cantante de Joy Division), como en la excelente y triste “Desorden”, o los himnos de desazón adolescente, con “Si está bien” o “Rey Sombra”.
En 1994 era un riesgo considerable concebir, grabar y editar un álbum con tantas lecturas como Super 8, con letras como: “Me dice: ‘Ven, ¿quieres hacerlo con mi amiga?’ / No está nada mal / vamos a hacerlo con mi amiga, tiene 15 años ya” ( “10.000”); “He tomado esta medicina la mitad de mi vida, quizás / y hace casi quince días que no puedo dejar de temblar / ¿Qué puedes ofrecer que aún no haya probado?” (“Rey Sombra”); o “Hay un cuerpo girando en la cocina / al final de una cuerda atada a una viga” (“Desorden”). Letras terribles, inquietantes, con una sensibilidad que ninguno de los miembros de su generación ha transitado.
Las influencias más destacadas son Teenage Fanclub, Big Star, Sugar, The Field Mice, Spaceman 3, The Cure o Family, pero nunca se plasman de un modo directo. Los Planetas utilizan sus referencias musicales como campo de experimentación pero el resultado es un sonido muy personal, siendo difícial encontrar paralelismos sonoros concretos.




1.2. POP (1996).


Pop es un gran disco, a pesar de los problemas que encontraron con el productor Kurt Ralske, el cual tardó en asimilar como dar forma a un ramillete de canciones excelente. Porqué el corazón del segundo LP del grupo se encuentra en sus irresistibles melodías pop, sus abrasivos estribillos, sus letras cínicas y llenas de referencias personales: la ironía de “Una nueva prensa musical”, la preciosa declaración de amor de “Jose y yo”, la intimidad lírica e instrumental de “Ciudad azul”. Por otro lado están las descarnada y delicada “8”, la referencia sexual implícita de “La máquina de escribir” y el pop incorpóreo de “Ondas del espacio exterior”.
Pero pese a la alta calidad de las canciones, para los componentes del grupo, Pop es un álbum insatisfactorio, con temas muy diferentes los unos de los otros, sin ninguna continuidad. El segundo disco de Los Planetas, grabado entre octubre y noviembre de 1995, es en muchos sentidos más light que Super 8 y el posterior Una semana en el motor de un autobús. La desafortunada producción de Kurt Ralske crea un ambiente de eclecticismo (de la psicodelia de “DB” al punk-pop de “Punk”) que a veces desorienta y otras asombra. No obstante, Pop está plagado de buenas canciones de tipo “no-rock”, es decir, menos eléctrico. El disco se inicia con “DB” un tema noise-rock de ocho minutos que nunca va a sonar en la radio y donde dicen: “Piensas que me entiendes y no sabes nada sobre mí”. Y siguen los guiños irónicos hacia su entorno con la vibrante “Una nueva prensa musical”, que explica su peculiar relación con la prensa. El disco continúa con “Jose y yo”, una emocionante composición sobre una antigua novia de J (Maria José), el amor y las sensaciones que comparten (“Jose y yo sólo somos enfermos / pero es que nunca tuve una enfermedad más dulce”). O “Himno generacional #83” en la que hacen una crítica sobre aquellos que sólo les consideran como un grupo adolescente. Florent afirma: “Nos molesta que digan que somos un grupo de adolescentes. Nosotros no somos adolescentes, aunque las letras vayan de una época muy intensa de la vida, de pasarlo bien y de pasarlo mal”.
En Pop siguen vigentes las influencias de Mercury Rev, The Chills o Teenage Fanclub, aunque de una forma más suave. El conjunto suena más limpio, aseado, sentimental, a excepción de “La máquina de escribir”, un tema agresivo y duro, que recuerda a los mejores Luna y a la Velvet Underground. Las baterías se las reparten Raúl y Eric Jiménez con más peso específico de este último por su mayor veteranía, afinidad y calidad.
La canción más elegante y producida del disco es “David y Claudia” (en referencia a la relación que mantenían David Copperfield y Claudia Schiffer). Destacan también “8” por su intensidad in crescendo, y “Aeropuerto” canción sobre el final de un amor que no pudo ser.




1.3. UNA SEMANA EN EL MOTOR DE UN AUTOBÚS (1998).


Una semana en el motor de un autobús es el final de la inocencia. Es un tercer disco difícil, amargo, desencantado, profundo y conceptual. Y el resultado funcionó. La gira de Pop los había dejado tan agotados que la bajista May abandonó el grupo. Ya habían perdido dos baterías y Florent estaba enganchado a las drogas. El grupo estaba desintegrado, pero había canciones para un nuevo disco. Afortunadamente, llegan al momento más crítico de su carrera en plenitud expresiva. En otoño de 1997, tenían todas las canciones en maqueta y ya advirtieron que “toda la música iba encajando en una idea más básica, más fácil de explicar y entender; como un título”. Este título sería Una semana en el motor de un autobús, con claras reminiscencias de la canción “Stuck Inside Of Mobile With The Memphis Blues Again” de Bob Dylan. La idea del concepto sería la historia de un joven abandonado por su novia que decide abandonarse a las drogas, el sexo y las fiestas salvajes para acabar dándose cuenta de que el alivio ha sido un espejismo, y que para tirar hacia delante tienes que aprender a escuchar en su interior.
En Una semana en el motor de un autobús, Los Planetas nos invitan a un detallado itinerario de decepción, destrucción y redención, a través de doce temas que no ofrecen respiro alguno. Esta vez la producción de Kurt Ralske es espectacular. Ralske, enamorado del Ok Computer de Radiohead, había planteado una producción parecida aunque más barata. A casi nadie del grupo le gustaba ese disco, pero confiaron en su criterio.
Sin olvidar las aportaciones de Eric, Banin, Kieran o el propio productor, Jota y Florent despliegan aquí sus mejores armas: guitarras compungidas, efectos muy especiales, la sensibilidad de violas y violines y letras muy intensas y tristes. Desde la inicial e inigualable “Segundo premio” (“mirando las paredes de este cuarto / rezando porque vuelvas otra vez”) hasta “La Copa de Europa” (“casi pienso que no tengo fuerzas para hacerlo / y encontrar dentro de mí algo nuevo”), el tercer disco de Los Planetas, entre influencias de Radiohead, The Chills, Spiritualized o Luna, nos muestra una semana en la vida de un chico que vive un proceso de recomposición desde que le deja su novia hasta que se encuentra consigo mismo, con sus dudas y contradicciones y su estrecha relación con las drogas y el exceso.
Los arreglos de cuerda y viento, los abruptos cambios de ritmo, la voz de Jota a veces dolida y a veces intensa, las guitarras apocalípticas, los estribillos rotundos y apasionados y unas letras que merecen capítulo aparte componen un álbum estremecedor. La efectividad de “Desaparecer” (“esta vez nadie te va a preguntar / porque no aguantaría una mentira más”), el lirismo de “La playa” (“un verano que fue una pesadilla / si me acuerdo me duele todavía”), la claridad y la euforia de “Cumpleaños total” (“y aunque juré que nunca más / me acerco hasta el servicio a que me pongan otra”), las melodías agridulces de “Parte de lo que me debes” (“cuántas veces lo intenté / y no sirvió de nada”) o “Un mundo de gente incompleta” (“ahora lo que odio y lo que somos casi es igual”) y la crueldad de “Segundo premio” (“y si esto te hace daño / si te puedo hacer sufrir / ha servido para algo / al menos para mí”) hablan del cansancio de tener un amor para luego perderlo, la amargura de haberlo tenido sabiendo de antemano su final.




1.4. UNIDAD DE DESPLAZAMIENTO (2000).


Unidad de desplazamiento es el cuarto disco de estudio de Los Planetas. Este disco supone un cambio respecto a sus predecesores. Su forma de componer los temas ha sido la habitual, temas pop de guitarras y con letras que llegan a lo más hondo del alma, pero que se van alejando de la inmediatez de los hits, perdiéndose por extraños paisajes melancólicos. Como muy bien dijo Jota, se trata de “un disco de psicodelia emocional”.
Con Unidad de desplazamiento el grupo granadino estrena nuevo contrato con la multinacional RCA. El título del disco es un indicativo de mirar al futuro, hacia adelante, con la intención de no repetir esquemas y fórmulas que ya han funcionado. Se trata de un disco arriesgado, producto del idealismo y del inconformismo de la banda, que requiere más de una escucha antes de sumergirse en su contenido. Florent explica que “meterse en las canciones de Los Planetas no es nada fácil, son canciones inmediatas pero que requieren un esfuerzo de escucha aunque al final te atrapan y te convencen”. Es un disco menos directo que los anteriores, con desarrollos más largos y complejos. El conjunto destaca por la unidad que presenta.
Para Jota, “este disco es puro Planetas, más extremo, las canciones pop son más pop, y las más experimentales más experimentales”. En las letras, geniales como siempre, predominan la inseguridad, las rupturas, los pequeños placeres, lo cotidiano, historias personales pero universales. La canciones siguen basándose en las experienzas y los sentimientos de Jota, aunque son ligeramente menos derrotistas, transmitiendo la sensación de que, pase lo que pase, siempre hay un flotador donde agarrarse.
Pese a todo, las canciones del disco están impregnadas de un tono triste y melancólico, en un intento de huir de una situación incómoda pero sin acabar de conseguirlo. Florent explica que “Yo personalmente me siento más identificado con aquellas canciones que tienden a un aire nostálgico o triste. La felicidad existe, pero en gotas, y el estado de ánimo que predomina en mis amigos o en mí es la tristeza, la inseguridad y los problemas cotidianos”. Unidad de desplazamiento ofrece dos novedades respecto al anterior: la primera que el bajista escocés Kieran Stephen, quien había incrementado su aportación al grupo con la composición de temas como “Flotando sobre Loscos”, “Anuncio para coches” y “Tierras altas”, abandona el grupo por razones personales antes de finalizar la grabación del disco. La segunda –y la más importante- es el estreno de El Refugio Antiaéreo, nuevo estudio de grabación propio de Los Planetas y que ha resultado fundamental para probar, por vez primera, grabar la mayoría de las canciones en primeras tomas.
El disco se abre con “Flotando sobre Loscos”, extraña canción tanto por el título como por la participación vocal de Verónica de Meteosat, único tema del disco donde no canta Jota. Continúa con “Santos que yo te pinte” que representa uno de los momentos más intensos y mejores del disco. Rabia y amargura a partes iguales, convierten el deseo de venganza en la meta a alcanzar. “Maniobra de evasión” y “Vas a verme por la tele” son los temas más pop clásico, fluido y agridulce. Las letras tratan de las relaciones de pareja, de los celos y la resignación. Destacan también “Que no sea Kang, por favor”, pseudo-balada deliciosa e hiper sentida, con una voz susurrante y mágica, desesperación, resignación y esperanza para la salvación personal, y “Un buen día”, una canción para cambiarte la vida por completo. J narra un día de su vida en el cual se van sucediendo acciones comunes recogidas desde el punto de vista amargo y eufórico que siempre tienen el trasfondo del recuerdo de la relación que terminó. Una canción super pop en la que predomina la naturalidad de letra y de melodía, que aunque la escuches cuatro millones de veces no te cansas de escuchar.

1.5. ENCUENTROS CON ENTIDADES (2002).


Encuentros con entidades es el quinto trabajo del grupo granadino Los Planetas. Su nuevo trabajo sigue la línea que trazaron con Unidad de desplazamiento, su anterior disco. Producido por Carlos Hernández y la propia banda, a lo largo de las diez canciones predomina la potencia guitarrera, letras oníricas, tragedias amorosas y nuevas y envolventes atmósferas, que suponen un claro paso hacia delante aunque estamos ante un trabajo más disperso y menos homogéneo que el anterior.
El disco se abre con dos de los temas más importantes en la discografía de Los Planetas : “San Juan de la Cruz” mezcla la letra de temática mística con un crescendo lisérgico que provoca un subidón de adrenalina, y “Corrientes circulares en el tiempo”, el primer single del disco, un auténtico espiral musical que te va envolviendo progresivamente, acompañada por una letra de desamor planetario. Destaca también “Dulces Sueños”, el tema de mayor duración del disco, cuyos paisajes sonoros están llenos de intensidad y épica.
Los temas pop que se convierten en himno para fans también aparecen en “Encuentros con entidades”. “El espíritu de la Navidad”, “El artista madridista” o “Pesadilla en el parque de atracciones” despachan buen rollo, ironía, cabreo y deseos de venganza por doquier, y “Mis problemas con la justicia” nos lleva directamente a “Línea 1”. Destaca especialmente “Mil Millones de Veces”, una canción circular e intensa que se va haciendo progresivamente más inquietante provocando unas sensaciones totalmente novedosas. “Temporalmente” es el tema más rock, mientras que “Nosotros Somos los Zíngaros” es la más distorsionada.
Encuentro con entidades fue grabado en su Refugio Antiaéreo. Destaca por su sonido más bien contenido dentro del contexto del resto de la obra de Los Planetas. La voz de Jota aparece más intensa y rabiosa que nunca para plasmar los temas de siempre (drogas, desamor y fútbol), pero bajo otro prisma más psicodélico. Según Florent “la psicodelia nos permite flipar, improvisar y crear muchos más paisajes”.
En definitiva, estamos ante una continuación de la linea iniciada con el disco anterior, manteniendo el sonido dominado por guitarras saturadísisimas, baterías tocadas muy fuertes y letras sobre venganza extrema.




1.6. CONTRA LA LEY DE LA GRAVEDAD (2004).


El sexto trabajo de Los Planetas es, de lejos, el disco más flojo del grupo granadino. Sus problemas con la discográfica fueron muy importantes y desestabilizadores. El título Contra la ley de la gravedad siginifica ir contra la corriente principal, contra el poder establecido. La música es una forma de buscar caminos por los que escapar de esa realidad, de lo que se te impone, de cómo las relaciones se van deteriorando. Quizás la situación de tensión con su discográfica (con la que terminaban relación tras la entrega de este disco), sea lo que ha provocado que las letras de las nuevas canciones no sean tan directas e intensas como siempre, sino que sus versos estén dominados por metáforas e imágenes oscuras y dobles sentidos.
La música, al igual que las letras, es muy diferente respecto a los anteriores. Suena mucho más limpia y la voz de Jota aparece más clara y mejor tratada. Tambié ha cambiado la forma de componer. Normalmente, hasta ahora, Los Planetas partían de una melodía de guitarra o de una línea de bajo, pero en este disco utilizan mucho más el teclado, no sólo para componer sino también dando más protagonismos a los arreglos de Banin. Además Contra la ley de la gravedad se diferencia del resto de la obra planetaria en que ha sido grabado a medida que se iba componiendo en su Refugio Antiaéreo. Este hecho, que puede ayudar a unos mejores acabados al poder grabar sin prisas, también puede provocar una sensación de dispersión. Para Florent “Puede que se eche en falta el hecho de grabar todas las canciones en un período determinado de tiempo, en el mismo sitio, con los mismos aparatos, con la misma gente”.
El conjunto del disco ha sido producido por la propia banda. El nexo común es que casi todas las canciones se han grabado en directo, capturando ese momento y ese estado de ánimo en el estudio. Buscando cierta frescura, hay canciones con guitarras que casi no se han ensayado y se han dado por buenas a la segunda toma. El resultado final es una colección de canciones más que un LP conceptual. El primer single fue “Y además es imposible” (BMG, 04) cantada por J y Irantzu Valencia de La Buena Vida, en forma de diálogo. El arranque del disco es muy en la linea de “Flotando sobre Loscos” de Unidad de desplazamiento. “El golpe de gracia” es una canción de separación pero con un aire optimista y sin rencor. El disco continua con “Devuelveme la pasta” el tema más pop planetario del disco junto a “Canción del fin del mundo”, en las que encontramos reminicencias de Interpol y Editors. “Nunca me entero de nada” es una canción de medio tiempo y supone el momento álgido del LP. A continuación la psicodélica “Experimentos con gaseosa”, que ya había aparecido en el CD “Los planetas se disuelven” que acompañaba al especial que la revista Cáñamo dedicado a la relación entre música y drogas, atmósferas densas y profundas.
Hasta aquí la parte más importante del disco, formada por seis temas intensos y muy bien estyructurados. Pero a partir de “124” la segunda parte del disco baja mucho las prestaciones. Toda ésta parte puede ser considerada de relleno y hace que el conjunto de la sensación de ser un trabajo cojo y a medio terminar. Según Banin ese hecho tiene una explicación: “Lo hemos hecho de la única manera que hemos podido, ya que las condiciones externas y la infraestructura que nos rodea no son las mejores. Pero eso no ha sido un capricho nuestro”. De ahí la existencia del penúltimo tema “Cumplimentando compromisos contractuales” como explicación para la irregularidad de su último disco (traducción de un tema de TV Personalities, uno de los grupos favoritos de Jota).



1.7. LA LEYENDA DEL ESPACIO (2007).


Los Planetas celebran sus 15 años de existencia con su séptimo álbum La leyenda del espacio, un título que es un claro homenaje al álbum de Camarón La leyenda del tiempo (1979). En ese disco experimental Camarón abría el flamenco al rock, teniendo una enorme repercusión tanto para el flamenco como para la música moderna. En La leyenda del espacio, Los Planetas dan un paso similar pero desde la otra orilla, encontrando un nuevo lenguaje para el rock al abrir su expresión al flamenco. Y lo consiguen porque no cambian de vocabulario, no hay palmas ni guitarras flamencas. Predomina su discurso habitual de rock psicodélico y eléctrico, pero con un fondo de pasión, intensidad y hondura sentimental.
Erik es capaz de adaptar los complejos ritmos a los sonidos de la batería. Miguel excava espacios con el bajo para los fraseos de Jota, que adapta las estrofas del flamenco a su propia voz sacándole más emoción que nunca. Las letras están en gran parte extraídas del imaginario del flamenco clásico, el folclore popular absorbido a través de Fosforito, Antonio Mairena, Manolo Caracol, José Menese o Enrique Morente. Florent, por su parte, retuerce las guitarras eléctricas creando arabescos psicodélicos que sustituyen las florituras de la guitarra flamenca, mientras Banin se aparta de los teclados para añadir más guitarras, creando muros de sonidos arrolladores. Es el disco más flamenco de Los Planetas pero también el más psicodélico y eléctrico. Se sirven del flamenco para dotar a su propio sonido de más intensidad y llevarlo a lugares hasta ahora desconocidos.
La leyenda del espacio se inicia con “El canto del Bute”, unos tientos donde las guitarras eléctricas actúan de fondo ante la descripción atormentada de un infierno emocional que hace Jota (“Me estoy quedando sin fuerzas, sólo espero ya la muerte; me falta sangre en las venas, mi corazón se retuerce; me estoy muriendo de pena y tú no vienes a verme”). Su mejor arranque desde “Segundo premio”. La segunda canción que aparece es “Si estaba loca”, una canción superlativa , en la que alrededor de la rítmica melodía de unos verdiales brotan vertiginosas espirales de ruido formando un creciente muro de electricidad que refleja sus influencias originales (My Bloody Valentine o The Jesus And Mary Chain) para agrandar su noise-pop más épico. Es un medio tiempo destemplado con una letra inquietante, mucha clase. En “Negras las intenciones” también predomina la electricidad psicodélica más espacial y oscura de Los Planetas inyectándole en el alma el hondo de unas soleares.
También aparece la psicodelia en forma lírica, no siempre marcada por la sangre y la pena. “Entre las flores del campo” desgrana psicodelia pop mezclado con el colorido jovial de unos caracoles y “La Verdulera” tiene un punto lisérgico de alegría lúdica e irónica. “La Que Vive En La Carrera” son unas granaínas adaptadas de modo explosivo para abrirle un nuevo universo rítmico al rock eléctrico.
En otras canciones aparece el sonido más tradicional de Los Planetas pero a través de una renovada frescura. “Alegrías Del Incendio” tiene la inmediatez de un primer single que recuerda a “Mi hermana pequeña” y “Deseando una cosa” son unas luminosas cantiñas con teclado sesentero que recuperan el sonido optimista y desafiante de “Super 8”. “Sol y Sombra” también recuerda las influencias originales del grupo desde el lado más oscuro (Joy Division, Mercury Rev y Pale Saints). También podrían encajar en cualquier disco anterior “Reunión en la cumbre” y “Si me diste la espalda”, impactos de noise-pop melódico y rotundo con una contundencia eléctrica inusitada. No aburrir haciendo lo de siempre es otra muestra de su enorme talento.
La última canción es una caña cantada por el maestro Enrique Morente. “Tendrá que haber un camino” es un estremecedor lamento jondo dedicado al tristemente fallecido Aleix “Sideral” (amigo personal de Jota y de Florent), donde la poderosa voz de Morente está perfectamente integrada en medio de una inquietante, oscura y narcótica tensión eléctrica.
En definitiva, estamos ante un disco imprescindible en la historia del rock en castellano del siglo XXI, reivindicando una identidad propia en un lenguaje universal pero tan anglosajón como el rock. Ese sentimiento particular extraído de las raíces más profundas del folclore es un signo de distinción, igual de definitivo que cantar en español.
Florent explica lo difícil que ha sido este paso hacia delante en su carrera. “Hemos hecho una especie de experimentación pura y dura. De coger una canción flamenca, con tiempos marcados, y nos hemos quedado a lo mejor con la melodía y sobre la melodía empezábamos a funcionar. O respetábamos ese ritmo y componíamos la melodía sobre ese ritmo. Muchos temas han salido a la primera, pero otros no. El flamenco tiene una cedencia bastante siniestra, en el sentido que es muy desgarrada. Ha habido temas por la melodía y por la letra flamenca daba la sensación de que éramos un grupo siniestro”.
Banin también explica las causas de esa transformación: “No podíamos hacer otro disco siguiendo la misma dinámica. Necesitábamos salir de ahí. Cuando cantó Morente una de las canciones y la escuchamos nos quedamos flipados porque eso sí que era una unión entre dos mundos: entre la forma de ver nuestra música y el flamenco. Eso sí que parecía algo nuevo de verdad, algo que no se ha escuchado nunca”.







2. Aparición, repercusión y originalidad.


2.1. Los Planetas, ¿un grupo “indie”?


La aparición de Los Planetas se produce en plena efervescencia de lo que se conocerá como escena indie nacional. Como “indie” entendemos aquella música realizada por un artirta o un grupo que se mantiene lejos de la influencia de lo que conocemos como “mainstream” (música que cuenta con grandes medios para su producción y comecialización, que llega con facilidad al público, que se caracteriza por ser de carácter comercial y poco innovador). Para la revista New Musical Express, la definición de indie es no estar conectado con una gran discográfica (Warner, Universal, Sony BMG y EMI). Esta definición no es del todo correcta ya que las discográficas pequeñas también se dedican a vender. Además, algunos de los artistas con más alma y actitud independiente, trabajan bajo el sello de éstas gigantes discográficas con total libertad creativa, como es el caso de Sonic Youth, Radiohead, Pulp o Flaming Lips.
A finales de los 80 el término indie se asoció a bandas de pop y rock que recogían todas las influencias recibidas y las llevaban más allá, mezclando rock, punk y vanguardia, para llegar a un pop muy elaborado. Los grupos más representativos fueron Sonic Yoth, Violent Femmes, Pixies, Dinousar Jr y My Bloody Valentine, entre otros, y sus discos fueros editados por pequeños sellos independientes.
Los Planetas, desde su aparición, han sido considerados como la cima de ese movimineto alternativo que surgió en España entre 1994 y el año 2000, y que culminó en la celebración del Festival Internacional de Banicássim en 1996. Sin embargo, los granadinos siempre se han defendido diciendo que ellos nunca han sido un grupo indie porqué, desde su primer disco, graban bajo el sello de una multinacional (RCA). Hacia 1990 se produce en España la explosión indie, en la que aparecen inumerables grupos que intentan clonar el sonido ruidoso de grupos americanos como Pixies o Sonic Youth, sin dar demasiada importancia a lo que decían, cantando en un inglés bastante pobre y usando guitarras sónicas.
Cuando el indie se puso de moda la única excepción fueron Los Planetas, ya que recogían la influencia de grupos anglosajones de guitarras como los Mercury Rev de la primera época, o los británicos Spacemen 3 y Joy Division, así como del flamenco. A diferencia de la mayoría cantaban en castellano y sus letras eran oscuras y pesimistas. Después de grabar un single con el pequeño sello Elefant Records firmaron por la multinacional RCA, en lo que muchos consideraron como una traición para la música independiente. Jota saldría al día siguiente a uno de sus conciertos con la camiseta de la discográfica a modo de provocación. Era una muestra de protesta hacia lo que consideraban una interpretación errónea de la música. Ellos se consideraban únicamente como una banda de rock&roll. Querían evolucionar y firmar por un sello importante les daba esa posibilidad, además de mantener plena libertad creativa.
Después de la eclosión de la escena indie muchos grupos desaparecieron. Actualmente solo siguen en activo tres de aquella época: Sr Chinarro, Lagartija Nick y Los Planetas. La etiqueta “indie” con que se definió a la emergente escena española de los noventa era tan vahga y heterogénea como reduccionista, aunque realmente se trataba de englobar a una música hecha con guitarras, entre el pop y el rock, pero que podía hacer uso de medios electrónicos y con una actitud muy amateur.


2.2. Letras en castellano.


Con la aparición y el auge de la escena independiente la mayoría de los grupos que aparecen en España optan por cantar en inglés, para diferenciarse de los grupos mediocres que repiten sin cesar las radiofórmulas y por influencia de sus grupos favoritos. Pero Los Planetas, desde el principio, se convierten en el grupo más importante de su generación, demostrando que se puede ser diferente, profundo e intenso cantando en castellano. Jota explica lo raro de esa situación inicial: “Al comienzo de esto del indie, en las listas de mejores discos del año y en todas las encuestas de ese tipo éramos los únicos que cantábamos en castellano, y nos sentíamos raros. Lo que está claro es que en castellano sé lo que digo y en inglés no sé exactamente lo que digo. Me da corte hablar de tonterías”.
Jota se convierte desde el principio en uno de los mejores letristas en español, por explícito, intenso y directo. Debajo del ruido de las canciones de Los Planetas, se intuye la voz de Jota, siendo a veces imperceptible en una primera escucha, haciendo caso omiso a los consejos discográficos de subir la voz y hacerla más clara. Violencia, sexo, drogas, viajes y ciencia-fición son algunas de las cosas de las que hablan sus letras, aunque las más intensas van de amor y desamor.
Las letras de Los Planetas se convierten para en fan (entre los que me encuentro), en la banda sonoro de su vida, identificándose en multitud de ocasiones hasta tal punto, que te hace dudar sobre la posilbilidad de que Jota no esté observando nuestras vidas desde la lejanía para poder desgarrarnos por dentro. Para Jota las letras son muy importantes y dedica a ellas un gran cuidado: “Quiero ser lo más claro posible con mis letras, y me da mucho miedo hacer el ridículo. Están al borde de lo que puede resultar patético. Hay un punto que separa lo genial de lo ridículo, y me da pánico no saber mantener el equilibrio”.
Juegan un papel importante en los discos de Los Planetas los títulos de las canciones y los juegos de palabras y las segundas intenciones que se encierran en ellos.



Los títulos de las canciones.

Los títulos de las canciones destacan por su originalidad. Muchas veces nada tienen que ver con la letra. Algunos de los títulos más representativos del universo planetas son los siguientes:

“10.000”
(J): Con diez talegos consigues ser feliz en este mundo. Diez talegos y “flipas”.
(Florent): Ahora son más: quince talegos, por lo menos.

“Brigitte”
(J): Es Brigitte Bardot, un prototipo de belleza superganso que a mí me “flipa”. También era una novia de Florent que encajaba en ese prototipo.


“Rey Sombra”
(J): El Rey Sombra es un personaje con poderes psíquicos que lucha contra la Patrulla X.

“La caja del diablo”
(J): Un día de “tripi” me quedé dormido y tuve un sueño que me dejó “flipado”. Conocía a una tía y me enrollaba con ella. De repente, era mi hermana, se transformaba en el diablo y yo la encerraba en una caja y luego salía y… bueno. Mi hermana otra vez, ¿no? Son sólo personajes. Mi hermana es superbuena tía: estudia Derecho. No hay que tomarse en serio estas cosas. ¿Qué pasa? ¿Qué Vladimir Nabokov se folló a Lolita y luego hicieron lo mismo James Mason y Stanley Kubrick?”.

“DB”
(J): Es David Baker, claro. Kurt Ralske es supercolega suyo y le pidió que cantara en nuestro disco Pop (RCA, 1996), aunque fuera por teléfono. Pero no consiguió encontrarlo porque estaba produciendo a un grupo.

“Ciudad azul”
(J): Ese título es de Florent; que lo explique él.
(Florent): Pues no me acuerdo…

“La máquina de escribir”
(J): Pero, ¿Cómo hiciste esa asociación de ideas? La canción no tiene nada que ver, pero no se nos ocurría nada y va éste y dice: “La máquina de escribir”. Claro tío, la máquina de escribir. ¿Cómo se lo iba a discutir nadie?.
(Florent): Es el paradigma de título que no tiene nada que ver con la canción y al mismo tiempo dice mucho.
(J): Ah, ¿sí?

“David y Claudia”
(J): Se la puse a un amigo mío, Jesús Izquierdo, que es el que ha hecho los arreglos de “La Copa de Europa”, y me dijo: “Éstos parecen David Copperfield y Claudia Schiffer”. Yo no había caído, pero su historia define perfectamente la canción.

“El coleccionista”
(J): La película de William Wyler.

“8”
(J): Es la hora a la que te despiertas.
(Florent): Ésa fue idea de May.

“Aeropuerto”
(Florent): Una palabra que me gustaba.
(J): La historia de la canción también lo reclamaba, porque es sobre alguien que vive cerca del aeropuerto y ve desplegar los aviones.

“Prefiero bollitos”
(Florent): Un día se nos acabó la cocaína y dije: “Pues prefiero bollitos”.
(J): Como queriendo decir: “Prefiero estar muerto”; que es como obviamente se debería llamar la canción. Entonces vino May y dijo que esa canción no se llamaría “Prefiero estar muerto” por cojones. Lo de bollitos supongo que se refiere a las niñas así jovencitas.

“El centro del cerebro”
(J): es el centro de operaciones del universo, donde se maneja el cotarro. La canción habla de lo que haré si consigo controlarlo: “fliparéis” cuando sea yo quien domine.

“Manchas solares”
(J): Psicodelia pura.

“Espiral”
(J): Es la psicodelia por antonomasia. La sensación típica de cuando estás “flipando”, que todo se repite como en una espiral. A mí me pasa y por eso lo puedo explicar, pero es una sensación extraña. Todas las percepciones se van conviertiendo como en un ciclo, y al final desaparece por abajo como un embudo…

“Línea 1”
(J): El autobús que sube al polígono donde Florent vivía antes, un barrio de casas chungas como el de Sevilla.

“La copa de Europa”
(J): Cuando Koeman tiró la falta ésa, mientras el balón iba por el aire, me pasaron todas esas ideas por la cabeza. Eso es lo más grande, ser feliz: la Copa de Europa. El disco empieza con el “Segundon premio”: “Si no te tengo, pero al menos puedo hacerte daño, ya sirve para algo”. Ése es el segundo premio, y después de todo lo que pasa el supuesto personaje durante el disco gana la Copa de Europa, que es algo así como descubrir la verdad. Ése es el primer gran premio.

“Un día en las carrera de coches”
(J): Suenan como unos ruidos raros del moog o del theremin o de no sé qué suena ahí, y nos recordaban al ruido de las carreras de coches.

“La guerra de las galaxias”
(J): Es el símbolo de una idea bestial, ¿sabes? Es una forma de vida en sí misma. Sólo tienes que ver la película para ver que expresa perfectamente lo que quiere decir la canción, es la idea base.

“Sin título”
(J): Como se puede comprobar, a algunos títulos sí le damos vueltas, pero a otros, no. No discutimos, pero a veces van saliendo nombres y ninguno nos gusta. Así es como alguien dice algo como “La máquina de escribir” y acaba colando, aquí no salió nada.

“Un buen día”
(J): Quería reflejar un trozo puntual de mi vida, algo que no me define ante los demás ni tiene mucha trascendencia, y que tanto tú como el chaval que escucha la canción se pueden identificar con ella sin tener que pensar que esas cosas solo les pasa “al J” que es artista. Si lo consigo, entonces estoy contento.






Los títulos de discos.

También son muy sugerentes los títulos de los discos, que tienen referencias muy diversas.


Super 8 (RCA, 1994).
El título hace referencia a la búsqueda del grupo por no sonar muy limpio, para ofrecer un sonido más auténtico, igual que el formato de grabación del Super 8. Es el disco más representativo de la producción alternativa española de los años 90.


Pop (RCA, 1996).
El título hace referencia al hecho de que se alejan del noise, con temas más emocionales y lisérgicos. Ofrecen lo que para ellos es el “pop” auténtico, sin prejuicios.


Una semana en el motor de un autobús (RCA-MBG, 1998).
(J): El título del disco surgió cuando me encontré a un colega al que no veía desde hace tiempo, y le pregunté: “¿Qué tal, cómo estás?”, y me respondió que había estado mal, que había sido como estar una semana en el motor de un autobús.


Unidad de desplazamiento (BMG, 2000).
(J): El título encierra bastantes ideas. La principal es la sensación se salir fuera, de no quedarte quieto y paralizado ante cualquier problema o situación. En lo que respecta al grupo, el título recoge la idea de que Los Planetas es una formación que tiende a mirar hacia delante, a no repetirse en fórmulas pasadas.


Encuentro con entidades (BMG, 2002).
El título hace referencia a las atmósferas complejas que protagonizan la obra, dominada por la potencia guitarrera, letras oníricas y tragedias amorosas.


Contra la ley de la gravedad (BMG, 2004).
Este título describe la lucha contra los elementos que ha tenido que vencer para poder grabar el disco. Especialmente difícil la relación con la discográfica, que al final se soluciona.


La leyenda del espacio (BMG, 2007)
El título es un homenaje al álbum de Camarón La leyenda del tiempo (1979). El romanticismo tortuoso de las letras de Jota encaja perfectamente con la retórica flamenca. La portada del disco es la primera que no realiza Javier Aramburu. El autor es Daniel D´Ors, que presenta una portada misteriosa y minimalista.




2.3. La relación con las drogas.


Los Planetas le han cantado mucho a la droga. Sin subterfugios ni hipocresías, haciendo siempre uso de metáforas evidentes. Jota trata como nadie el tema de las sustancias estimulantes en sus canciones. Y lo hace por experiencia, logrando ser decididamente inconcreto, construyendo bonitas frases para recresar viejas sensaciones sin caer en la repetición de esquemas propios o ajenos. Y eso que, desde los más primitivos bluesmen rurales hasta los grandes nombres del flamenco, pasando por Parálisis Permanente, Siniestro Total, The Velvet Underground o Spacemen 3, la droga es un lugar común en el cancionero universal.
Florent explica que “utilizamos las drogas como un campo de conocimiento personal. Las drogas, para crear, te abren puertas a nuevas visiones que de otra forma sería imposible que surgieran”. Los Planetas no ocultan sus hábitos, ni en sus letras ni en entrevistas, pero tampoco van de toxicómanos autoconscientes
Los Planetas le dan una actual y nueva vuelta de tuerca. En 1994 aparece el primer cd del grupo, Super 8, con una portada inolvidable en la que el diseñador Javier Aramburu plasma la alucinógena esencia de la banda en un muñeco indie agarrado a su guitarra, con la cabecita gacha, sobre un espiral multicolor que ya ha adquirido la categoría de icono. El disco se abre con un monumental clásico del pop rock lisérgico, “De viaje”, que nos ofrece los avances tóxicos con un poderoso noise pop de fondo para escapar de la realidad.
En 1996 Los Planetas editan Pop, con una delirante portada multicolor que añora los 60 y un diseño interior a juego, donde Aramburu nos muestra las cápsulas y pastillas que sirven de combustible a la banda. En “Jose y yo”, por ejemplo, Jota canta: “Tomamos cualquier cosa y viajamos en alfombras y todo parece distinto, siempre es otro sitio”.
En 1998 se publica Una semana en el motor de un autobús, un cd casi conceptual consagrado al desamor y la droga, en la que la enorme X negra sobre fondo naranja advierte desde la portada que estamos ante un disco tóxico y corrosivo. En “Cumpleaños total”, el estribillo reza: “¡Y aunque juré que nunca más, me acerco hasta al servicio a que me pongan otra!” “Linea 1” es una canción donde la adicción muerde la cola del remordimiento: “Lo he pensado esta mañana, levantarme de la cama, comprar algo de comida y empezar con otra vida. Y después pensé, mejor que no y puse la televisión, subí a pillar un poco más, después de todo esto no está mal”.
Unidad de desplazamiento, publicado en el 2000, aparece con una portada en la cual una nave espacial deja una estela blanca bajo la nariz de una cocainómana endemoniada. La psicodelia domina en el disco. Según Florent, “la psicodelia es una parte de la música que nos permite flipar, improvisar y crear muchos más paisajes”. Con la canción “Un buen día”, aplastante pieza pop y hit definitivo del disco, llega el escándalo: el casi fotográfico costumbrismo del texto (“He estado con Erik hasta las seis y nos hemos metido cuatro millones de rayas / y no he vuelto a pensar en ti hasta que he llegado a casa / y ya no he podido dormir como siempre me pasa”) trae problemas al grupo cuando los ejecutivos de RCA deciden sustituir la frase “y nos hemos metido cuatro millones de rayas” por la frase “y se ha lesionado el de rayas”, para poder programar la canción en ciertas emisoras de radio. Al final la banda aceptó. Según Jota, “fue una concesión, no podemos andar siempre peleando: somos artistas, pero estamos en una compañía comercial”.
Así pues, con este repaso hemos comprobado la naturalidad con la que la banda toca el tema de las drogas, aunque sin hacer campaña de ello.

2.4. Influencias.


Los Planetas han dejado en su discografía y en sus entrevistas una serie de datos sobre cuáles son sus bandas favoritas, las canciones y los discos que le han servido de inspiración para algunas determinadas canciones. En la música pop todo está practicamente inventado, y componer es un poco como dejar escapar las influencias que llevas dentro. Lo original de Los Planetas es que parten de esa base para reinventarse por completo, consiguiendo un sonido muy identificativo de ellos, “el sonido Planetas”, aparentemente alejado de cualquier influjo.
Florent explica que a la hora de componer “me dejo llevar por cualquier cosa menos por mis grupos favoritos. A la hora de coger una guitarra, que para mí es un momento mágico, me influyen un compendio de situaciones, sobre todo ajenas a la música, como una película que acabo de ver en ese momento o una pelea con mi novia. Si de repente surge alguien que llama mi atención, eso me hace sentir otra vez que hay un montón de cosas vivas en la música y dentro de mí. Admiro a esos grupos, pero no se convierten en referencia de lo que hago”.
Sorprendentemente, a Jota también le influyen igual sus grupos favoritos (Spaceman 3, Television Personalities, Joy Division) como las películas que más le interesan. “Las películas te afectan mucho porque alguien ha puesto ahí su vida. Pero también me influyen conversaciones con amigos. En el fondo soy como una esponja. Todo me sirve: libros, películas, cómics… frases de Aldous Huxley, Raymond Chandler…”.
Aún así hay canciones que recuerdan a grupos concretos. Algunas reminiscencias son musicales y otros de letras. Destacan especialmente las siguientes:


“Pegado a ti”
Casi una versión no acreditada de “With A Girl Like You”, de The Troggs.

“Brigitte”
El popular “If Can´t Change Your Mind” incluido en el primer álbum de Sugar tiene partes de la letra casi traducidas, como el fragmento “si no puedo cambiar tu forma de pensar entonces nadie lo conseguirá”.

“De viaje”
¿Cómo no relacionar letras como “podemos irnos juntos lejos de este mundo tú y yo / en un viaje por galaxias infinitas hacia el sol”, con las canciones del primer y único disco de sus adorados Family? Tema como “La noche inventada” o “Viaje a los sueños polares” lo dejan bien claro.

“10.000”
Cercana, incluso en exceso, al ruidismo sosegado de los primeros singles de Moose.

“Rey Sombra”
La frase “ mientras fuera en la calle llueve el sol como miel” está inspirada en la célebre “Suzanne”, de Leonard Cohen.



“Desorden”
No es sólo es un homenaje a Ian Curtis, cantante de Joy Division que se suicidó en la cocina de su casa el 18 de mayo de 1980 por motivos que van desde su epilepsia hasta el hecho de tener que decidir entre su mujer y su amante. Ian se pasó la tarde escuchando discos, mirando fotos y viendo una película, “Stroszek”, de Werner Herzog, cosas que se reflejan en la letra de “Desorden”. Pero es que, además, la frase “He encontrado algunos fotos que hace tiempo ni miraba” recuerda a “I´ve been looking for you so long for this pictures of you” de “Pictures Of You”, de The Cure. El mismo Jota lo reconoce: “La idea de “Desorden” parte de esa canción de Robert Smith.

“DB”
Una referencia a David Baker, ex cantante de Mercury Rev (y amigo del productor Kurt Ralske, que trabajó con Los Planetas en sus disco Pop y Una Semana en el motor de un autobús). La inicio de la canción recuerda a “Ceremony” de Joy Division, mientras que el resto nos lleva a la canción de los Rev “Chasing A Bee”.

“8”
El fragmento de la canciónn “Double Summer”, del álbum “Soft Bomb” de los neozelandeses The Chills, que es el origen de “cuando me despierto es casi por la mañana / lleva encima sólo la sábana / y por la ventana entran ya algunas luces”. Hay también claras influencias –más musicales que literarias- de The Chills en piezas como “Toxicosmos”.

“Aeropuerto”
Según el propio J, “hay partes de la letra que pueden recordarte a canciones de Alaska y Los Pegamoides”. Seguramente se refiere a “todo eso que dijiste cuando estábamos saliendo / que ya no querías verme nunca más / no pensé que fuera cierto”.

“Segundo premio”
La melodía de voz de J al inicio de la canción está sacada de “Smoke Signals”, uno de los mejores temas del segundo álbum de The Magnetic Fields. También suena parecida a algunas armonías de Etienne Daho.

“Cumpleños total”
Revisión canalla y más contundente de “Rebelde sin caspa”, de Beef, incluido en “Beef Tongues”.

“Nueva visita a la la casa”
“Ése era un tema en que Raúl Santos tuvo mucho que ver; y como le gustaban mucho los Red House Painters, por eso suena tanto a ese grupo”, dice J. No sólo musicalmente. La letra también hace pensar en temas como “Medicine Bottle”: “Trajes y cortinas cuando estaban a punto de olvidar los días de la casa de cristal / polvo en las ventanas y las velas amarillas y las luces que tu hermana nos regaló”.




2.5. Actitud rebelde y relación con los medios.


Los Planetas no has tenido una fácil relación con los medios, especialmente con aquellos alejados a la prensa especializada. Cuando habla de los medios, Erik se muestra tajante: “Nuestra relación con los medios es bastante dura, somos un grupo que molesta bastante. A los medios clásicos no les gusta nuestra música, ni nuestra ropa ni nuestra actitud”. La polémica de Los Planetas con ciertos medios no tienen fin.
Lo cierto es que los grandes medios, al margen de que el grupo rechaza de principio cualquier imposición comercial ajena al seno de la banda, éstos jamas le han dedicado el tiempo necesario para escuchar la música de Los Planetas con atención. Además, el grupo, según manifiesta Jota, no pretende facilitar esta labor “no estoy preparado para repetir diez mil veces las mismas respuestas, quizás porque me faltan palabras o no soy lo suficientemente listo como para cambiar mis apreciaciones”.
Por su parte, a pesar de que la prensa especializada les ensalza y respeta la propuesta musical de los granadinos, sobretodo después de la publicación de Una semana en el motor de un autobús, ésta puede ser tan dañina como la local o nacional. Jota critica con dureza la actitud hipócrita de algunos periodistas; “cuentan que Los Planetas se drogan sin mencionar que ellos también se están metiendo rayas con nosotros”.
Pero por otro lado, también hay que decir que los granadinos fueron protagonistas de La Semana de … en 40 TV de Canal Satélite Digital del 9 al 15 de Octubre del año 2000. Allí J, Florent y Eric departieron durante una hora con Julián Ruiz, dando un repaso a todos sus videoclips y hablando sobre el pasado y el presente de Los Planetas. Mencionar que en el mismo canal de televisión ofrecieron íntegro el concierto que el grupo ofreció en el Festival de Benicássim de ese mismo año.
Así las cosas, parece claro que Los Planetas siguen sumidos en la continua contradicción que les supone estar en una multinacional que les deja hacer la música que quieren pero que a la vez les obliga a ciertas concesiones promocionales que el grupo acepta (cuando lo acepta) de mala gana. Jota sigue convencido de que “llegará el momento en el que muchísima gente comprará nuestros discos sin necesidad de bajar nuestro listón creativo. No podemos traicionar a nuestra música por la promesa de vender. No creo que sea buena idea convertirse en un grupo de spot. Australian Blonde se dejaron engañar y olvidaron mantenerse fieles a unos ideales”. El vocalista es consciente que Los Planetas son un grupo respetado y que logra ventas récord en el lanzamiento de sus singles sin apenas necesidad de promoción. Sus fans no suman millones pero son siempre muy fieles y cualquier publicación de nuevo material es consumida por ellos con devoción. Y es que Los Planetas no rechazan las ventas y saben que es lo verdaderamente importante. Eso sí, quieren vender aquello que puedan transmitir con su música.
Durante la promoción de su disco Unidad de desplazamiento (2000) tuvieron algunos encontronazos con grandes medios. Por una parte recibieron la petición de grabar una nueva versión de la canción ´Un buen día´ para que se pudiera radiar por la Cadena 40 Principales. El motivo de dicha censura fue la frase ´[…] y nos hemos metido 4 millones de rayas […]´, que tenía que ser sustituida por ´[…] y he leído en el Marca que se ha lesionado el de rayas […]. Con decisiones de este estilo los 40 siguen demostrando que la música les importa bien poco, que no entienden su dimensión estética y que únicamente son una plataforma publicitaria.
Del mismo modo, el día 18 de octubre del 2000, Los Planetas debían actuar en el programo Lo + Plus, pero se marcharon sin realizar la promoción prevista por falta de acuerdos técnicos. Lo cierto es que, discrepancias en el tema que debían interpretar dio lugar a un conflicto directo. Mientras en grupo que tocar “Santos que yo te pinté, la dirección del programa se decantaba por “Un buen día” en su versión políticamente correcta. Al final abandonaron el estudio poco antes de la emisión del programa en directo con lo que seguísan agrandando su fama de grupo maldito.
Pero su actitud respecto a la prensa no viene de una mala crítica que no han podido encajar. Los Planetas miran y sienten la música 24 horas al día e intentar analizar cualquier comentario al respecto, y saben que todo tiene que ser analizada con distancia. Jota reconoce que una buena crítica puede ser incluso más perjudicial que una negativa: “quizás se habló del grupo como algo mayor de lo que era en realidad. La prensa empieza a subir al grupo antes de que esté preparado. Creerte lo que dicen de ti puede traer malos rollos, piensas que eres un músico del copón, que eres más de lo que en realidad eres y así vienen los bajones, al ver que eso no se concreta…”.
Los Planetas empezaron a conocer como eran las promociones de los discos en una entrevista que concedieron a Onda Madrid sobre Super 8. Cuando llegaron al estudio el tío, empezó a hacer preguntas sin sentido mientras estaba leyendo la hoja promocional porque no sabía nada del grupo. Al principio Los Planetas se quejaron de que los críticos hablaban de ellos como un grupo para adolescentes únicamente porque eran terriblemente jóvenes.
Muy diferente es la relación de Los Planetas con los medios alternativos, la cual, especialmente desde Una semana en el motor de un autobús, es una relación de enamorados. Mondo Sonoro, AB, Ruta 66, efe eme, han destacado siempre al grupo como el mejor de la escena independiente española, con mucha diferencia respecto a los demás. Aunque muy significativo ha sido el apoyo de Rockdelux, cuyo poder en la escena alternativa es inmenso, y arrastra al resto. Rockdelux ha publicado el único libro que se ha escrito sobre Los Planetas, publicado en 1999 y escrito por el crítico Jesús Llorente.
Tanto Florent como Jota tienen entre sus amigos a los críticos y los periodistas musicales más influyentes de la prensa nacional. Jota explica que “tengo más cosas en común con muchos periodistas que con algunos músicos, y muchos críticos de Rockdelux se han comprado los mismos discos que yo, les llevo leyendo desde hace mucho tiempo, incluso antes de que existieron Los Planetas; hay una buena relación. El éxito en Rockdelux se debe a que ofrecemos una especie de espíritu, una cierta intensidad que la mayoría de los grupos de la escena indie no ofrecen”.
Sin embargo, Los Planetas siempre dicen que de la música es mejor no hablar ya que es inútil hacerlo. Florent explica que “Hablar de las sensaciones de la música, de la filosofía de la música, y perderse en palabras y en ideas es absurdo, porque la música es música, y los que están alrededor de ella intentan capturarla con palabras y darse una razón para hacerla creíble”.




2.6. Los Planetas en concierto.


He visto a Los Planetas cerca de 37 veces en todo tipo de conciertos; presentación de un disco, festival multitudinario, fiestas mayores de pueblos, y, pese a las dificultades con las que se han encontrado, siempre han mostrado su poderío en directo, pese a que a veces arriesguen con canciones poco atrayaentes para el público no devoto.
La prensa no especializada, a veces, no está formada para ver a un grupo que se les escapa de sus concepciones pre-históricas sobre lo que entienden como música española. En uno de sus conciertos de la gira del año 1994, en sus inicios, tocaron una versión muy distorsionada de ´La caja del diablo´de 23 minutos. Al ver semejante espectáculo de ruido, con May tocando el bajo de espaldas y la voz de J sonando sucio por debajo de la electricidad de las guitarras, un periodista de Diario 16 escribió que Los Planetas eran como los curas de las misas antiguas, que daan las ceremonias en latín y de espaldas al público.
Los conciertos de Los Planetas siempre han sido motivo de controversia. O tenían el día y lo bordaban o se pasaban de vueltas y no transmitían… Pero desde el varapalo del FIB 98 el grupo ha enderezado definitivamente el rumbo y ahora cada concierto es una demostración de profesionalidad y efectividad. Jota explica como se produjo esa transformación: “fue Eric el que tomó un poco los mandos e impuesto su criterio sobre como deben ser los directos. Ahora estamos más mentalizados de que la gente ha pagado por vernos y no nos dejamos llevar tanto por las sensaciones que uno tiene tocando”.
El grupo se ha concienciado de que los shows de corte psicodélico suelen encontrar una respuesta fría entre el público, mientras que los directos más directos son mejor acogidos. Aunque ellos disfruten menos, el público se ve más reconfortado. Para Jota “Quizás cuando un grupo como Los Planetas, Spiritualized o My Bloody Valentine disfruta visiblemente en el escenario eso es síntoma de qaue el espectador medio no lo esté pasando tan bien. Y en cambio cuando el artista sufre por mantener cierto equilibrio, por estar centrado y tocar como un profesional, es cuando la gente lo aprecia de veras. Y ahora hemos decidido que no podemos caminar más sobre el filo en el tema de los disrectos, porque el llevar las cosa hasta el límite puede estar tan cerca de lo genial como de lo ridículo.
Especialmente importante es la relación que han mantenido Los Planetas con el Festival Internatcional de Benicassim. El grupo goza de un trato especial y excelente por parte del festival de Benicassim, todo ello en gran parte propiciado porque Jota y Florent son amigos personales de los hermanos Morán, organizadores del festival y propietarios de la Sala Maravillas entablaron amistad con la banda desde sus inicios. El primer concierto que Los Planetas efectuaron fuera de Granada fue precisamente en la Sala Maravillas de Madrid, la cual estrenaba con ellos la multitud de conciertos que ha programado con posterioridad, donde los grupos noveles han tenido la opostunidad de mostrar sus primeras composiciones.
Los Planetas son el único grupo estatal que ha conseguido actuar en el FIB en ´prime time´, metiendo la cabeza entre los gigantes británicos y es que el carisma de Jota y los suyos alcanza niveles elevadísimos entre el público asistente al festival. Después de su conflictivo concierto de 1998, en el 2000 volvieron a participar en una nueva edición del FIB. Ofrecieron una actuación segura y convincente, sin hacer demasiado inciso en sus nuevas composicione y metiéndose a todo el público en el bolsillo con sus temas más conocidos.




... La importancia de Los Planetas en la escena musical española y la complejidad y densidad de sus discos, hacen necesario una revisión a fondo de su obra. En este análisis he realizado un esbozo de aquellos aspectos que hay que resaltar y analizar, pero, sin duda, este estudio puede profundizarse más.
Es posible la realización de un libro en el cual se siguiese el mismo esquema de este análisis, pero profundizando más en cada punto. La obra sería necesario acompañarla de una entrevista en profundidad de cada uno de los miembros de Los Planetas, para ver como ven la escena musical en la actualiadad, tanto en España como en el exterior, además de intentar indagar en la evolución que han experimentado a lo largo de los años.
Por último, sería recomendable estudiar aspectos que no he podido desarrollar en el trabajo pero que sería interesante destacar. Una es la importancia que han dado siempre a la publicación de los singles desde el principio de la banda y las recopilaciones tan cuidadas que han editado, para sus fans. También habría que explicar el estudio de grabación que ha montado Los Planetas en Granada, y el sello discográfico que han creado (El ejército rojo), para potenciar a grupos noveles, demostrando su pasión por la música en su sentido más amplio y de base, en su esencia.
También sería interesante analizar lo que piensan determinados músicos, críticos o artistas sobre Los Planetas y la importancia que les conceden, y reflejar todas las letras de las canciones, ya que muchas de ellas no se entienden bien en una primera escucha al quedar solapada la voz por la intensidad de las guitarras. Un posible esquema a seguir sería el siguiente:

1. Biografía y Obra.
1.1. Super 8 (1994).
1.2. Pop (1996).
1.3. Una semana en el motor de un autobús (1998).
1.4. Unidad de desplazamiento (2000).
1.5. Encuentro con entidades (2002).
1.6. Contra la ley de la gravedad (2004).
1.7. La leyenda del espacio (2007).
2. . Aparición, repercusión y originalidad.
2.1. ¿ Los Planetas, un grupo “indie”?
2.1.1. Música “indie”.
2.1.1.1 Definición.
2.1.1.2 Historia.
2.2. Importancia de Los Planetas en el pop independiente español.
2.2.1. Letras en castellano.
2.2.2. La relación con las drogas.
2.2.3. Influencias
2.2.4. Actitud rebelde y relación con los medios.
2.2.5. Los planetas en concierto.
3. Universo planetario.
3.1. Importancia de Javier Aramburu en la imagen del grupo.
3.2. Singles y recopilaciones.
3.3. El refugio Antiaéreo (estudio de grabación de Los Planetas).
3.4. El Ejército Rojo (sello discográfico para potenciar nuevas bandas).
4. Los Planetas desde dentro.
4.1. Entrevista a los miembros del grupo.
4.2. Los Planetas según los críticos y otras bandas.


BIBLIOGRAFÍA.


Los Planetas. La verdadera historia. Jesús Llorente. Barcelona. Ediciones RDL/Rockdelux, SL. 1999.

ROCKDELUX. Especial 20 Aniversario. Ediciones Rockdelux. Barcelona.2004.

El Pop después del fin del Pop. Pablo Gil. Barcelona. Ediciones RDL/Rockdelux. 2004.

ESPECIAL 200. Ediciones RDL/Rockdelux. Barcelona. 2004.

Música y drogas. Ed. Cañamo. Barcelona. 2004.

De viaje por el pop independiente. Javier Blázquez y Juan Manuel Freire. Reservoir Books. Ed. Mondadori. Barcelona. 2004.

Hacia una estética musical. Pierre Boulez. Monte Ávila Editores. Caracas. 1999.

“La industria de la música popular”. Frith, Shaw, Street. La otra historia del rock. Barcelona. Manontroppo. 2006.




REVISTAS.


ROCKDELUX 112. Barcelona. Octubre, 1994.

ROCKDELUX 163. Barcelona. Mayo, 1999.

ROLLING STONE. Madrid. Noviembre, 2006.

EN DESORDEN 1. Fanzine monográfico de Los Planetas. Barcelona. Octubre, 1998.

EN DESORDEN 2. Fanzine monográfico de Los Planetas. Barcelona. Octubre, 1999.

EN DESORDEN 3. Fanzine monográfico de Los Planetas. Barcelona. Octubre, 2000.

MONDOSONORO 110. Barcelona, 2004.

No hay comentarios: